El pasado jueves, el Palacio de La Moneda fue sacudido por la denuncia de violación contra el entonces subsecretario del Interior, Manuel Monsalve. Apenas dos horas después de que se hiciera pública la acusación, Monsalve ofreció una conferencia de prensa en la sede presidencial, donde anunció su renuncia y su intención de enfocarse en su defensa para probar su inocencia.
En este contexto, han surgido nuevos detalles sobre el caso, destacando el uso de la aplicación de mensajería Signal por parte de Monsalve, conocida por su alto nivel de privacidad. Signal ofrece encriptación de extremo a extremo para asegurar la confidencialidad de los mensajes, y en su sitio oficial afirman que “no podemos leer tus mensajes ni escuchar tus llamadas”.
Según informó La Tercera, el 1 de septiembre, Monsalve habría enviado mensajes a la denunciante a través de Signal con multas no laborales, activando la opción de «autodestrucción» de los mensajes, que los elimina automáticamente 30 segundos después de ser enviados. Ese mismo día, ambos se encontraron en el Costanera Center.
Además, el 21 de septiembre, Monsalve habría utilizado Signal para invitar a la denunciante a un restaurante peruano en Mac Iver, donde, según la acusación, consumieron una gran cantidad de alcohol.
Este caso ha causado un fuerte revuelo en la política chilena, y el uso de Signal, junto con su función de autodestrucción de mensajes, ha suscitado preocupaciones sobre la transparencia de las comunicaciones relacionadas con este tipo de acusaciones.